miércoles, 12 de mayo de 2010


Me apetecía escribirte unas lineas.
Hablar de tí y de tu paso fugaz por aquí. De esa mirada y esa sonrisa de trasto que tienes. Pero me doy cuenta de que para hacerlo, tendría que hablar de muchas cosas que no han pasado: de noches que se nos han quedado en el tintero, besos que nos hemos perdido, conversaciones que no hemos tenido...
No busco culpables. Fui yo quien pedí que te fueras a pesar de toda tu magia, y es que hoy no tengo ganas de jugar. Al menos hoy no puedo jugar.
Y mientras te veo caminar en sentido contrario, yo me quedo aquí, organizando pensamientos, ordenando sentimientos.
Siempre serás ese chicodiferente que ronda por ahí, y espero que un dia se produzca la alineación de los planetas, las estrellas brillen más que nunca, y tú vuelvas aquí...

...sin ganas de jugar.

lunes, 19 de abril de 2010

(mi)Duelo

Hoy he tenido la necesidad de coger "Cartas para Claudia" y abrirlo por la página cuya esquina doblé la primera vez que la lei:

CARTA 26

Así es cariño, también dejar una casa implica un duelo.

La palabra duelo, etimológicamente, está relacionada con el concepto del dolor; consiste en la elaboración que realizo internamente cuando me separo de alguien o de algo. Cuanto yo haya querido a ese alguien o ese algo, marcará la intensidad y duración de ese duelo, pero no su existencia. Siempre hay un duelo por el que pasar después de una separación.

Nuestra educación conspira contra la elaboración y aceptación de nuestros duelos. Recuerda los mensajes de nuestros padres y profesores ante nuestras pérdidas infantiles: "Bueno ya ha pasado", "No llores más", "Ya tendrás otro mejor"... Tenemos el duelo. El dolor aparece como una tremenda amenaza a nuestra integridad y entonces, nos defendemos.

El intento más común es no comprometerse afectivamente con nada ni nadie, en la fantasía de que "si no quiero a nada ni nadie, tampoco me dolerá perderlo". Aviso: NO FUNCIONA. No solo no funciona porque este razonamiento impide el compromiso, el contacto y la intimidad, si no además porque, como te dije, el duelo no depende de cuánto queramos lo que perdemos.

El segundo intento es más terrible aun: no separarme nunca de nada. [...]

Por supuesto en las relaciones humanas nuestros semejantes han encontrado infinitas variables sutiles de este intento de no soltar nunca nada, y muchos aconsejan tomar cierta distancia de las cosas o las personas (hasta no estar seguro...).

Este modelo es conocido por las personas que no soportan la idea de separarse pero tampoco pueden permanecer juntas y entonces "dicen" que se separan. El "dicen" significa que solo es aparente. En realidad se siguen viendo tanto o más que antes; están pendientes de lo que el otro dice, piensa, hace o quiere; y en muchos casos salen juntos, terminando la noche en la cama, haciendo el amor más frecuentemente que cuando estaban juntos.

He visto muchas veces la complicidad feroz de este juego siniestro. Siguiendo los designios de un sádico guionista ambos empiezan a distanciarse casi festejando delante de sus amigos la pronta separación. Sin embargo basta que uno de los dos intente comenzar otra relación o se aleje más de lo pactado para que el otro se acerque a recordar viejos tiempos, a intentar corregir, y sobre todo a abortar el duelo del otro. Con el tiempo, como en los juegos de la vida, el otro se quede y es éste que se acercó el que se aleja esperando, claro, el boicot del primero...

Existe por último un tercer intento de huir de los duelos y es simplemente, negarlos. Esa situación de pérdida no existe.

"Está confundido, volverá a mi", "Alguien le ha estado llenando la cabeza, pero no lo dice en serio"...

Esta conducta pospone el duelo, pero no consiguen evitarlo.

Me importa vivir con toda mi plenitud mis duelos por mis pérdidas, mis cambios. Si no me puedo separar de aquello que hoy no está, no podré sentirme libre para vincularme con lo que en este momento si que está aquí.


JORGE BUCAY

domingo, 21 de marzo de 2010


Soy de las pocas personas en el mundo que no le gustan las croquetas. Tengo la manía de no poner remitente en el sobre y sigo escribiendo cartas en momentos a pesar de la existencia del email. Nunca escucho sonar el movil. Estoy enganchada a la coca-cola. Habitualmente escribo y no se lo enseño a nadie. Si pudiera irme a cenar con cualquier persona que yo escoja, me iria con Woody Allen. Me encanta volverme a la cama después de desayunar. No aguanto los zapatos de tacón más de cuatro horas. Prefiero el tren antes que el avión. Solo me he enamorado una vez. Tengo la risa muy facil. Me gustan las peliculas que cuentan historias cercanas que me creo e identifico. Siento la necesidad de hacer un viaje cada X tiempo. Me encanta la fotografia. Tengo cambios de humor y en ocasiones la sensibleria se apodera de mí. Soy muy (demasiado) directa. Me encanta leer, y los artículos de opinión de Arturo Perez Reverte. Prefiero una buena conversación antes que muchas cosas. Soy tremendamente desordenada. Necesito vivir cerca del mar. Bailar es una pequeña pasión. Soy muy despistada. Me fijo y recuerdo el olor de las personas importantes. Sueño con recorrer los rincones de la India. Mi pecado capital es la Pereza. Sueño cada noche. Adoro a Audrey Hepburn en cada una de sus películas. Odio que cambien de tema cuando hablo de algo. Estuve a punto de llamarme Veronica. Me encanta el humor de Groucho Marx. Me gusta pasarme ratos muertos leyendo citas de diferentes personajes. Tengo mucho interés curioso por las relaciones humanas. Soy tremendamente analista y siempre dudo enormemente antes de tomar una decisión. Se me dan fatal las matemáticas. No me gusta hablar por teléfono. Soy impulsiva y de vez en cuando hago cosas como esta.

"Aquél que dijo "más vale tener suerte que talento", conocía la esencia de la vida. La gente tiene miedo a reconocer que gran parte de la vida depende de la suerte, asusta pensar cuántas cosas escapan a nuestro control.

En un partido hay momentos en que la pelota golpea con el borde de la red, y durante una fracción de segundo puede seguir hacía delante o hacía detrás. Con un poco de suerte sigue hacía delante y ganas, o no lo hace y pierdes."

martes, 9 de marzo de 2010


[ P A U S E ]

domingo, 7 de marzo de 2010


¿Conocen este chiste?
Dos señoras de edad estan en un hotel de alta montaña.. hmm..y dice una:
- vaya aqui la comida es realmente terrible!
y contesta la otra:
- si además las raciones son tan pequeñas...
Pues basicamente asi es como me parece la vida, llena de soledad, miseria, sufrimiento, tristeza..y sin embargo..se acaba demasiado deprisa.

[ Annie Hall. Woody Allen. ]

lunes, 1 de marzo de 2010

1 DE MARZO


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